miércoles, 23 de marzo de 2016

EL ABRAZO DEL OSO


Escrito por Claudio Diz

Ahora el presidente Obama y el Departamento de Estado de la Casa Blanca aplicaron los conceptos de Albert Einstein, pues si una estrategia no funcionó durante cincuenta años, nada haría pensar que la misma estrategia de bloqueo político y comercial para derribar el régimen cubano funcionaría durante los próximos años. Algo debería cambiar.

Más de cincuenta años, los norteamericanos demoraron para darse cuenta que Cuba y su régimen marxista no representan ninguna amenaza para sus políticas de seguridad. Ahora el presidente Obama y el Departamento de Estado de la Casa Blanca aplicaron los conceptos de Albert Einstein, pues si una estrategia no funcionó durante cincuenta años, nada haría pensar que la misma estrategia de bloqueo político y comercial para derribar el régimen cubano funcionaría durante los próximos cincuenta años; eso en el caso de que tengamos planeta para ese entonces, pues si no cambia el paradigma productivo capitalista, sólo tendremos planeta habitable para dentro de 25 años y nada más, según estimaciones y proyecciones científicas.

Ante el fenómeno mundial de "la globalización", del creciente poder de las corporaciones, del cual los diferentes gobiernos nacionales apenas son instrumentos a su servicio, las ideologías marxistas de principio del siglo XX han quedado obsoletas ante el “pragmatismo” practicado por los partidos comunistas en los países donde son gobierno. De esa forma tenemos a China con un régimen capitalista de partido único, a Vietnan firmando Tratados de Libre comercio con EE.UU y sumándose a la globalización impuesta por las corporaciones o el caso de Uruguay, donde el Partido Socialista y el Partido Comunista, ambos integrantes del Frente Amplio, abalan las políticas neoliberales de bancarización de la economía (ley de Inclusión Financiera), ese Gran Hermano bancario y financiero que controla casi absolutamente toda la actividad económica del país a través de la banca pública y privada. Una especie de dictadura financiera impuesta sobre el bolsillo de los jubilados, trabajadores y empresarios.

El respaldo a los Tratados de Libre Comercio (TLC) con potencias como China, EE.UU o la UE donde dejarían en bancarrota a la pequeña y mediana industria nacional son impulsadas desde el FA debilitando el Estado de Bienestar. Los recursos económicos genuinos para desarrollar políticas sociales cada vez serán menores, pues con cada país en particular o con cada bloque comercial en general que se firme un TLC se dejan de cobrar aranceles, o los valores de estos aranceles se reducen al mínimo. Gobiernos populistas como el uruguayo o el brasileño donde participan socialistas y comunistas, dejan de obtener cifras millonarias en dólares por el no cobro de aranceles. Al decaer estas cifras y para mantener el nivel del gasto social, estos gobiernos “progresistas” aumentan la carga impositiva sobre la misma población que pretenden beneficiar.

La ley de Participación de Públicos con Privados (PPP) aprobada durante el gobierno frenteamplista y donde los partidos marxistas participan, no es otra cosa que la apertura de nichos de mercado a la iniciativa privada, la antigua empresa aérea Pluna es un ejemplo.

Se podría hacer una larga lista de medidas pro-capitalista que se realizan en países donde gobiernan o forman parte del gobierno partidos comunistas que se dicen "revolucionarios", ahora es la vez de Cuba.

EL VIRUS CAPITALISTA SE INTRODUCE COMO EL VIRUS DEL SIDA Y PASA DESAPERCIBIDO ANTE EL SISTEMA INMUNOLÓGICO DEL PUEBLO


¿Qué se podrá esperar de aquí en más para Cuba? ¿Una mayor conectividad a Internet y más W-FI con la colaboración de Google? Por acaso los cubanos no saben que los “servidores” (enormes computadoras de bases de datos y tráfico de Internet) y los satélites de comunicaciones le pertenecen a EE.UU? ¿No saben que de esa forma fue ubicado en medio de la selva colombiana el líder de las FARC y acribillado a balazos? ¿No conocen las quejas a Obama de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, por la intercepción por parte de la C.I.A de sus llamadas telefónicas? ¿Hasta qué punto está involucrada la C.I.A en la desestabilización democrática en Brasil por espionaje y escuchas telefónicas? Sin ir más lejos, a través de su propio invento (Internet) sabemos que Microsoft, Google, Facebook y Twitter trabajan brindando datos para la C.I.A. Para completar los perfiles de los usuarios (ellos dicen que para mayor protección de las contraseñas), desde ya hace un tiempo piden que el usuario ingrese su número de celular a la configuración de la cuenta. Si el usuario tiene un Smartphone (celular inteligente) podrá ser ubicado por el GPS y también podrán ser interceptadas sus llamadas telefónicas, y por supuesto grabadas como prueba de “algo”.

¿Los cubanos tampoco saben que las embajadas norteamericanas funcionan como centro logístico para espionaje de la CIA en el territorio donde se encuentran? Ahora La Habana tendrá la suya. ¿Pero que fue realmente lo qué hizo que Cuba se dejara abrazar por el oso capitalista? Según estimaciones científicas, de continuar el Calentamiento Global, las islas caribeñas y la propia Cuba desaparecerían del mapa dentro de unos cincuenta años. Es una hipótesis personal, pero valedera. Por eso vuelvo a repetir que no hay régimen "capitalista" o "socialista" que se sea viable sin tener en cuenta un mundo cambiante, donde los cambios climáticos serán más poderosos que cualquier superpotencia o la ideología de una pequeña isla.

Hoy, la seguridad para las superpotencias no pasa por cuidarse de un comunismo que no existe, o de grupos fundamentalistas terroristas que realizan atentados para atraer la atención de los Medios, ni siquiera por controlar políticamente o militarmente a los países productores de petróleo. Hoy somos víctimas y victimarios de nuestro propio invento. Hoy, lo más revolucionario no es el marxismo o el leninismo; lo más revolucionario es salvar al Planeta y a la propia raza humana que debe encontrarse en armonía con las demás diferentes formas de vida animal y vegetal. Hoy no son más buscados y asesinados los comunistas como en la época de la guerra fría y la etapa dictatorial en América Latina, pues pasaron a ser funcionales al Sistema. Hoy somos buscados y asesinados los que defendemos nuestro hábitat ante la depredación de las corporaciones y sus gobiernos cómplices, muchos de ellos integrados también por comunistas. Ayer fueron los Chico Méndez defendiendo el Amazonas, hoy es Berta Cáceres en Honduras y otros activistas ambientales, asesinados impunemente por defender el agua, la tierra y los bienes naturales.

Hoy, lo más revolucionario se llama “ecologismo” y es a nosotros que las corporaciones de biotecnología como Monsanto y las empresas mineras y extractivas deben temer. No le haremos la vida fácil a ningún emprendimiento o a políticas gubernamentales que vayan en sentido contrario a la vida y la salud del ser humano, y también a la extinción de las diferentes especies que habitan nuestro planeta. No nos abrazaremos con la Coca Cola para que patrocinen la liberación de una docena de tortugas, sabiendo que están dañando la salud de miles de personas con sus ingredientes de sal, azúcar, ácido fosfórico y otras sustancias nocivas para la salud. No nos abrazaremos con cadenas de supermerados que explotan a sus trabajadores con salarios miserables, venden comidas transgénicas, pollos engordados a base de hormonas, pez panga (Pangasius hypophthalmus) que es criado y engordado en el contaminado río Mekong, por solo hecho de que promuevan el empaquetado con bolsitas de nylon "biodegradables" como forma de "marketing verde". No nos abrazaremos con el Intendente socialista Daniel Martínez, que está construyendo un caño kilométrico en la bahía de Montevideo para tirar la materia fecal de los barrios del lado oeste de Montevideo. A eso le llaman "saneamiento básico", en una etapa histórica donde las ciudades construyen plantas de depuración de aguas servidas antes de contaminar los mares, como tampoco nos abrazaremos con cualquier oportunista o ONG que quiere hacer del "ecologismo" su fuente de ingresos personal, y ¡miren si los habrá!